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Be better

Borja Delgado

Borja Delgado Feo, fuerte y formal

El trabajo tenaz del hombre tranquilo

enero - 2014

Es tarde y Borja espera pacientemente en su estudio. Sus ojos rojos dicen que ha sido un duro día de trabajo. Más adelante su cara, al leer algún mensaje en el móvil, confirma nuestras sospechas. Guarda tranquilamente su teléfono, nos mira fijamente y una amplia sonrisa aparece en su rostro. Amable, cariñoso y divertido; cualidades de un tipo generoso, inteligente y muy curioso. La entrevista termina realmente tarde, Borja se despide con los ojos rojos y una generosa sonrisa. Bajando las escaleras sabemos que a esos ojos aún le quedan unas cuantas horas de trabajo.

Intro:

Borja Delgado ha sido todo y ha hecho de todo. Es diseñador, especialista en estándares web y accesibilidad, además tiene un talento especial para la experiencia de usuario. Desde hace tres años dirige junto a sus dos socios Hanzo, un pequeño estudio que entiende el diseño de forma amplia: diseño de producto, servicios, interfaz, visual, experiencia, parece que no tienen límites.

Domestika ha sido una parte importante de su vida. Participó en el proyecto casi desde sus inicios, primero como usuario y más tarde como trabajador. Asumió responsabilidades de jefe de proyecto, director de diseño y experiencia de usuario y finalmente como director de operaciones.

En su mochila lleva muchas horas como consultor: BBVA, Universidad Politécnica de Madrid, Universidad de Alcalá de Henares, la Fundación ONCE, Vogue y un larguísimo etcétera. De lo aprendido Borja no se guarda nada, ofrece su conocimiento como profesor en cursos y conferencias. ¿Cómo serían hoy los hombres del renacimiento? Muy parecidos a Borja, lo tenemos claro.

¿Cuando eras niño… Soñabas con dedicarte a algo creativo?

Excepto soñar con dedicarse a algo creo que cuando eres niño haces de todo, debes dejar volar la imaginación y fantasear con muchas cosas. Soñaba con ser jugador del fútbol y piloto de aviones. No creo que sea importante imaginarse trabajando en algo creativo, para posteriormente, trabajar en ello. Lo importante es soñar.

También es cierto que desde muy pequeño empecé a programar. Con once o doce años me apuntaron a un curso de programación en Basic. Aprendí con un Commodore 64, así que, además de jugar al Perico Delgado, intenté sacar algo productivo.

Borja Delgado
Borja Delgado preparado para dar una charla en el MadinSpain
F. original – Autor: MadinSpain.

“Llegué al diseño de una manera bastante extraña. Pero sinceramente, creo que todos los que estamos metidos aquí, en temas de diseño, lo que en su momento se llamó ‘Nuevos Medios’, somos mucho de nuestro padre y de nuestra madre.”

¿Cómo llegaste al mundo del diseño y cuál fue tu evolución?

Llegué al diseño de una manera bastante extraña. Pero sinceramente, creo que todos los que estamos metidos aquí, en temas de diseño, lo que en su momento se llamó “Nuevos Medios”, somos mucho de nuestro padre y de nuestra madre.

Soy licenciado en INEF. Tras una juventud en la que me lo pasé muy bien programando en Basic, mis estudios y mis intereses se orientaron en otra dirección. Sin querer, a mitad de carrera me encontré con los ordenadores, y de nuevo, me lo pasé en grande trasteando con ellos. Quería saber más, así que fuí a una academia para hacer un curso de programación. No tenían plaza en el curso que yo quería, entonces me apunté a otro de “diseño de no sé qué…”. Un afortunado accidente del destino.

En esta academia iba a clase a leer el libro de Corel Draw que me dieron, aguanté un mes. Pensé que lo que hacíamos en clase lo podía hacer por mi cuenta. Empecé haciendo trabajillos de diseño con la sana intención de comprarme más libros y seguir estudiando. Me acuerdo que pensaba: “¡Joer! Estos carteles en los bares, estas cartas de restaurantes. ¿No podré yo hacerlo mejor? Aunque solo sea para sacarme veinte euros y comprarme otro libro… 3.000 pelas. ¡Reventando el mercado!”. Así, empecé yo a diseñar.

Me compré libros de diseño Web, de programación, hacía cosas con Director, en 3D, hacía de todo un poco. Por aquel entonces no había una diferenciación tan clara entre especialidades. Programaba, diseñaba, pero también llevaba la red de la oficina y era el que sabía de ordenadores. Con el paso del tiempo, me dieron el título de “responsable multimedia”, nadie sabía qué carajo era eso.

No tengo una formación oficial en diseño, ni en programación. He tenido que ser bastante autodidacta: libros, blogs, foros etc. Desde la programación salté al diseño, de ahí a llevar equipos, temas de experiencia de usuario, diseño de servicios, alguna pincelada de negocio y marketing. En definitiva, un poquito de todo.

¿Qué haces actualmente?

Hace tres años fundé Hanzo junto con Diego Blanco y Joaquín Martí. Somos un pequeño estudio de diseño, aquí mi función principal es liderar la estrategia digital y la experiencia de usuario en los proyectos, aunque al final hago de todo: llevar clientes, labores de comercial, mucha gestión, etc. Lo que surja a la hora de llevar adelante un negocio de diseño.

¿Echas de menos estar en tu cueva, en vez de salir a la calle a visitar clientes?

¡Muchísimo! De vez en cuando me apetecería olvidarme de todo y empezar de nuevo. Diseñar pantallas, coger el Photoshop y volver a ser un junior de visual. En mis inicios he maquetado y programado muchísimo, ahora lo tengo super olvidado.

Me encantaba el HTML y he dado muchos cursos como profesor, ahora no hago nada de eso. A veces, me apetecería volver a la cueva y picar CSS. Estoy muy a gusto donde estoy ahora mismo, pero echas de menos no estar en el fragor de la batalla. La relación con los clientes es lo que más marca el día a día del trabajo que hago ahora.

Hanzo, una agencia de diseño de servicios
Las oficina de Hanzo, el pequeño gran milagro de Borja y sus socios, descansa traquila.

“…una decisión realmente arriesgada fue la determinación de crear Hanzo. Queríamos montar un estudio de una manera muy determinada y trabajar, también de una manera muy especial.”

¿Tuviste algún mentor o maestro que marcó tu camino especialmente?

No tuve una formación reglada en diseño por lo que no he tenido un mentor o maestro, entendiendo por mentor a la persona que te guía y te lleva. Bueno, mejor dicho, digamos que he tenido muchos maestros. Cuando algo me interesaba iba picoteando en referencias y distintos libros, desde los clásicos a lo más actual.

Al formar parte del equipo de Domestika he tenido mucha relación con su comunidad y he estado cerca de gente que para mí son grandes profesionales. Te puedo mencionar a Gabriel Suchowolski de Microbians, a David Duprez que ahora forman Cocoe. En aquel momento encarnaban ese espíritu renacentista de gente que sabe programar, ilustrar, hacer fotografía y además, hacerlo bien.

¿Cuál ha sido la decisión más arriesgada de tu carrera?

He tomado varias decisiones arriesgadas. Soy un experto en cambiar de tercio profesional. Una decisión realmente arriesgada fue la determinación de crear Hanzo. Queríamos montar un estudio a nuestra manera y trabajar sin seguir algunas de las supuestas “verdades” del negocio.

Al final, tirarse a la piscina teniendo un trabajo estable fue atrevido. Tomarte en serio el tipo de trabajo que quieres aceptar y el que no, ese fue nuestro gran riesgo. Decidir llevar adelante proyectos de otra manera, el querer hacer algo especial fue valiente o un poco loco, depende de cómo lo mires. Hay una conferencia del 04×10 en la que cuento un poco más nuestra filosofía como empresa.

En el último años hemos dicho “no” a clientes muy gordos. No se trata de que nos propusieran cosas que no nos gustaran. Más bien se trataba de proyectos que tenían una serie de condiciones imposibles de cumplir por nuestra parte, al final, tratamos de ser honestos con nosotros mismos y con ellos. Les dijimos abiertamente; mirad, “creemos que los objetivos que tenéis no se pueden cumplir en el tiempo y en la forma que tenéis en mente. Preferimos ser honrados y decíroslo, dejémoslo correr y ya llegará otra ocasión”.

En un estudio pequeño como el nuestro, decidir no coger una gran cuenta es una decisión muy arriesgada. Otros estarían dando palmadas con las orejas, pero creemos que si no vamos a hacer un buen trabajo es preferible decirlo y dejarlo pasar. Veremos si el tiempo nos da la razón o no. Lo que sí sabemos es que los clientes lo agradecen. Nos dicen: “gracias por la sinceridad, preferimos no perder el tiempo o acabar todos en una situación complicada”. Y lo cierto es que al final han vuelto a surgir opciones de colaborar.

El tiempo nos dirá si nuestras decisiones son arriesgadas y buenas, o solamente arriesgadas y malas. Por ahora llevamos más batallas ganadas que perdidas y de eso, nos sentimos muy afortunados.

¿Estás satisfecho con tu carrera?

La verdad es que sí. A toro pasado siempre hay cosas que cambiarías, cuando echo la vista atrás me gustaría haber dedicado más tiempo a una formación específica en diseño, o trabajar un tiempo largo en el extranjero Pero estoy contento con mi evolución personal y la de Hanzo, en el fondo soy un tipo positivo.

“El tiempo nos dirá si nuestras decisiones son arriesgadas y buenas, o solamente arriesgadas y malas (en Hanzo). Por ahora llevamos más batallas ganadas que perdidas y de eso, nos sentimos muy afortunados.”

¿Qué piensas que estarás haciendo en 5 años?

No tengo absolutamente ni idea. Si miro cinco años atrás ni siquiera existía Hanzo, y si miro diez años atrás, estaba dando clases en un instituto y no tenía nada que ver con el mundo del diseño. Cinco son muchos años para saber lo que estarás haciendo entonces. ¿Qué me gustaría estar haciendo dentro de 5 años? Sinceramente, me gustaría que Hanzo siguiera vivo y fiel a los principios que nos han hecho llegar aquí. Además, me gustaría dejar de ser una empresa cien por cien de servicios y tener una parte de producto propio.

Cuando fundamos Hanzo ya sabíamos que queríamos crear un producto propio, tenemos ideas y alguna cosa a medias, aunque lo cierto es que el día a día no te deja mucho tiempo para dedicarlo a proyectos propios, ya ves que ni siquiera tenemos una web que pueda llamarse como tal.

Describe un día normal en tu trabajo.

Todos los días intento llevar a mis hijas al colegio, normalmente empiezo a trabajar sobre las 9:30 o 10 de la mañana. Ya en el estudio me pongo al tanto de los asuntos pendientes. Raro es el día que no tengo dos o tres reuniones con clientes. Procuro volver cuanto antes al estudio, comentamos todo lo que haya surgido y reviso todo el trabajo y las entregas del equipo. Sobre las siete de la tarde me voy a casa para estar un rato con mis hijas hasta que se acuestan. Y luego, si tengo suerte un rato de tranquilidad, pero casi siempre hay algún fleco que no he podido resolver durante el día y después de cenar vuelvo a la faena.

¿Perteneces o has pertenecido a alguna comunidad de diseño?

Hoy en día pertenezco pero no de manera activa. En su momento estuve muy metido en el desarrollo de Domestika. No soy uno de los fundadores originales de la comunidad, pero fuí de las primeras personas a las que se dió entrada en el proyecto. Para los que no conozcan Domestika, es una de las principales comunidades de diseñadores en lengua hispana. Yo entré cuando era un foro de 700 personas y lo dejé cuando era una comunidad de casi 70.000 usuarios.

Al principio entré como mero usuario del foro, pero me pasaba ahí la mitad del día. En esa época, participaba en Domestika pero lo hacía también en otras comunidades. Domestika creció mucho y tuve la suerte de ser parte de la organización en su época puramente amateur. Cuando el proyecto fue comprado estuve dentro de la empresa y pasó a ser un entorno más profesionalizado. Trabajé en la redefinición estratégica y de producto, pasando de un simple foro a una inmensa plataforma para diseñadores.

Al entrar recuerdo vivirlo con mucha pasión, casi hemos llegado a las manos entre nosotros, con miembros de otras comunidades, chascarrillos de cañas tenemos un montón. Hemos tenido nuestros rollos West Side Story, no solo temas de diseño: peleas de deporte, de política de todo. Te podría contar muchas cosas (Risas).

Desconferencia 2008: Esto NO es una beta
Borja en un momento de la Desconferencia 2008.
F. Original – Autor: desconferenciante.

“Hay diferentes tipos de comunidad que ayudan de distintas maneras. Algunas, ayudan más en tus inicios, centrándose en temas formativos o sociales. Cuando estás empezando sueles acudir a estos sitios porque quieres compartir inquietudes, o buscas recursos o tienes un montón de dudas.”

¿Piensas que este tipo de comunidades son importantes en nuestra profesión?

Sí. Hay diferentes tipos de comunidad que ayudan de distintas maneras. Algunas, ayudan más en tus inicios, centrándose en temas formativos o sociales. Cuando estás empezando sueles acudir a estos sitios porque quieres compartir inquietudes, o buscas recursos o tienes un montón de dudas.

Al final es gente joven que se está formando y lo que quiere es conocer personas con sus mismas aficiones; aprender, preguntar, participar, y sentir que pertenece a un colectivo. Así era Domestika en los inicios. Las asociaciones son las que han trabajado tradicionalmente en ese sentido y han tenido un papel aglutinador bastante importante. Por ejemplo, si te gusta la arquitectura o las bicicletas existen asociaciones de mil tipos, y si te gusta el diseño en flash u online, las comunidades online son las que están ahí, donde se junta la gente y habla de ello.

Pero algunas comunidades se están reenfocando y están empezando a ayudar cuando el profesional está ya maduro. Por ejemplo, cuando estaba en la comunidad de Domestika ayudaba a responder preguntas y dudas, pero ahora, honestamente no tengo tiempo. ¿Para qué son útiles las comunidades de cara al profesional? Muchas están intentando responder a esa pregunta. Yo veo una actividad más ligada a la promoción del profesional, a los eventos y actividades formativas más especializadas, a su papel como aglutinador de oferta y demanda de empleo y cosas así.

Si dieras un solo consejo a alguien que está empezando, ¿cuál sería?

Le diría que, hablando de medios digitales, nunca pierda la ilusión ni las ganas de aprender. Creo que en otros medios, la arcilla con la que a diario se trabaja no evoluciona tan rápido. Aquí, esto no es así, si te duermes, estás muerto. Hace tres años no existía una cosa llamada iPad, ahora es un segmento imparable del mercado. Por muy senior que fueras hace tres años, esto significa que hay que arremangarse y aprender. Estar ahí. Empollar igual que un novato, tener ilusión y capacidad por aprender igual que si acabaras de empezar en la profesión.

Nuestro mundo es así. Pienso que cualquiera que se crea muy especial y se relaje se está equivocando. Has de ser un tío humilde, curioso, te tiene que molar, te tienen que brillar los ojillos con estas cosas. Lo tienes que hacer porque te guste, no tiene que ser una obligación. Esto es lo más importante.

He tenido la suerte de trabajar con profesionales con muchos años dentro de la profesión y muchos de ellos aún conservaban ese brillo especial en los ojos por las cosas nuevas. Yo he visto a Mariscal, que lleva toda la vida en esto, que lo ha ganado todo y de repente, le miras y ves que le brillan los ojos haciendo un garabato.

Esa ilusión, esa capacidad de vibrar con las cosas, esas ganas de aprender y cacharrear en un tío con 50 años como profesional y podría estar pensando en retirarse es lo que debería de tener alguien que se quiera meter en esto. El resto se puede aprender. A mi me gustaría llegar a viejo teniendo la mirada de Paul Rand en la campaña de Apple.

“…estamos en esto porque nos gusta, esa gente está ahí porque les gusta y sigue disfrutando después de tantísimos años. La gente que lleva muchísimas horas en las espaldas y aún son como niños, así me gustaría mantenerme con el paso del tiempo, mantener la ilusión.”

¿Te ves como Mariscal? en el sentido de ser como un niño que está jugando.

A lo que me refiero es que mucha gente está pensando como loca en jubilarse. Si tengo suerte no me jubilaré nunca. Me gustaría pasar de trabajar cuarenta horas a la semana a trabajar cinco o diez. Tener setenta palos y seguir conectado. Yo que sé, dar clases, hacer consultoría o dibujar mis cosas, no sé, por qué no.

Al final, estamos en esto porque nos gusta, esa gente está ahí porque les gusta y sigue disfrutando después de tantísimos años. La gente que lleva muchísimas horas en las espaldas y aún son como niños, así me gustaría mantenerme con el paso del tiempo, mantener la ilusión.

¿Dinos los sitios Web que has descubierto y más visitas últimamente?

Te diría que un producto nuestro: Samyroad.com, que estamos construyendo junto con sus creadores en una apuesta por la calidad, con un contenido muy especial.

Y otro que he descubierto últimamente y me tiene totalmente alucinado es Drama en el portal, es un Tumblr que recoge los carteles psicóticos que cuelga la gente en sus portales y escaleras. Totalmente impagable.

Samyroad.com por Hanzo
Trabajo para Samyroad de Hanzo.
VOGUE por Hanzo
Trabajo para VOGUE de Hanzo.
Borja Delgado durante la entrevista con UXMAD.es
Borja Delgado en un momento de la entrevista.
Borja en Internet:
Su selección musical

(Disclaimer de Borja) Si me lo permitís aquí voy a ser un poco gamberro, cuando uno tiene que compartir música tiende a querer “quedar bien”, ser “cool”… pero en mi caso os voy a compartir unas cuantas canciones que tenemos en el estudio en una lista que se llama justamente “uncool” donde recogemos canciones que solemos poner asociadas a determinados momentos: cuando alguno está enfadado con un cliente, triste, estresado, con ganas de reír, de bailar, de viernes a última hora, etc. Todas un poco en clave de coña

Artista Canción
Los Chunguitos Dame Veneno
Celia Cruz La Vida Es Un Carnaval
Duo Dinamico Resistiré
Tonino Carotone Me Cago En El Amor
Martires del Compás Qué bonito es el amor
ABBA Dancing Queen
Tino Casal Eloise
Porretas Pongamos que hablo de Madrid
Bonnie Tyler Holding Out for a Hero
Loquillo Y Trogloditas Feo Fuerte Y Formal