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Ruymán Ferrera

Ruymán Ferrera Aborigen Leader en Everis

Trece puntos en treinta y cinco segundos

noviembre - 2014

Canario orgulloso de ser canario, responsable de proyectos y diseñador UX orgulloso de serlo. Le gusta hablar pero la mayoría de las veces prefiere callar y escuchar. Desde la biología al periodismo para llegar al mundo de la experiencia de usuario. Es diferente y lo sabe. Un gustazo escucharle, su acento canario y la certeza de estar frente a una persona que sabe de lo que habla. Ruymán ríe mucho, opina poco y pregunta de lo que no conoce.

Intro:

Estudiar biología y periodismo, y finalmente trabajar como consultor de experiencia de usuario debería decir algo sobre Ruymán Ferrera: es trabajador y meticuloso. Otra pista es su gusto por el baloncesto: es un buen jugador de equipo. Ser consultor no es fácil, no es algo para todo el mundo, y disfrutar haciéndolo es, además, un arte. Coordinar equipos de UX en consultoría es algo que se hace poco, hacerlo bien es más raro aún. Que esto te lo cuenten sus compañeros es lo que nos convence.

¿Cuando eras niño… soñabas con dedicarte a algo creativo?

No recuerdo ser consciente de saber a qué me quería dedicar. Me gustaba más la parte de ciencias y eso me llevó a estudiar biología. Para complicarlo todo un poco más, después estudié periodismo, sé que es una combinación extraña. He tenido que responder muchas veces sobre ello, y más aún cuando sale a colación la experiencia de usuario.

De mis años de estudiante en Biología, hay algo que recuerdo mucho, mi interés por la fisiología. Comprender cómo funcionan las cosas, los procesos desde el punto de vista celular y molecular.

También recuerdo el motivo por el que me planteé no trabajar en algo relacionado con la biología. Un día pregunté a una estudiante de doctorado si no se aburría del trabajo de laboratorio. Me respondió que para ella todos los días eran diferentes: los lunes hacía cromatografía; los martes, espectroscopía; los miércoles, electroforesis… Entendí que ese mundo era muy poco creativo para lo que quería hacer en mi vida. De todas formas estoy hablando de cuando tenía veinte años. Anteriormente no tengo ningún recuerdo de mis intenciones profesionales.

¿Cómo llegaste al mundo del diseño?

Después de Biología, estudié Periodismo en la misma universidad. Dio la casualidad que las prácticas las realicé en un periódico que estaban montando un portal de noticias en Internet, que por aquel entonces nadie sabía nada. Empezamos copiando y pegando con Dreamweaver, trabajaba con tablas, maquetaba noticias, no existía gestor de contenidos ni nada parecido. Estoy hablando del año 2001, ya existían CMS y formas de trabajar en el mundo editorial digital de aquel entonces, pero nadie en la organización las conocía.

Las mismas personas que montaron el periódico digital, crearon una empresa de desarrollo para trabajar con el Gobierno de Canarias. Me llamaron porque pensaban que aprendía rápido, así que empecé a trabajar con ellos generando contenidos digitales, redactando textos, buscando y tratando fotos. La mayor parte de mi trabajo al principio era para el portal del ciudadano Canarias.es; luego trabajamos para otras instituciones públicas, sobre todo para el Gobierno de Canarias. En esa primera época también me encargaba de los contenidos para el Teletexto de la Televisión Canaria. Ya puedes decir que conoces a alguien que trabajó en el Teletexto (risas).

Pasado el tiempo esta empresa se desmanteló, y quedamos sólo tres personas; casi toda nuestra actividad pasó a ser desarrollo web. Mis funciones pasaron a la gestión de proyectos, definición de contenidos, lo que en aquel momento aún no sabíamos que se llamaba arquitectura de la información. Hablo del 2004. Con el tiempo crecimos y desde 2008/2009 llegamos a ser diez personas. Me ocupaba de los contenidos, la gestión con clientes y la dirección de proyectos. Los diseñadores con los que trabajaba tenían mucha curiosidad por su trabajo y me la contagiaron. Recuerdo que, en 2002, se bajaban manuales en portugués para maquetar sin tablas. Hoy en día varios de ellos trabajan o han trabajado aquí en Madrid, en el mundo del UX.

Ruymán Ferrera en el Grupo de interés de Usabilidad del SIDAR, dirigido por Yusef Hassan, durante el Congreso celebrado en Logroño en 2010

Ruymán Ferrera en el Grupo de interés de Usabilidad del SIDAR, dirigido por Yusef Hassan, durante el Congreso celebrado en Logroño en 2010

“En aquella época aprendí a pensar visualmente, hasta ese momento seguía teniendo mucho lastre de periodista, pensaba que la mejor solución para explicar algo era escribir un texto.”

¿Y tu evolución?

Cuando trabajaba simultaneando el periodismo con la gestión de desarrollos web me di cuenta que me faltaba carga teórica, argumentación para la defensa de decisiones. Ya había leído a Nielsen, pero aún no había profundizado seriamente en el campo del UX. Entonces empecé a hacer formación específica. Cursé la segunda edición del Curso de Diseño de Web Eficaces en la Universidad de Murcia, impartida por aquel entonces por Yusef Hassan; también hice un Curso de Arquitectura de la Información para Sedes Web de la SEDIC, el Colegio Oficial de Documentalistas. A raíz de leer libros y seguir blogs fui conociendo los eventos como Cadius o las Desconferencias. Cuando fui a Fundamentos Web en el 2006, conocí a mucha gente de The Cocktail y de DNX, eran las personas a las que leíamos y nos interesaba mucho todo lo que estaban haciendo.

Finalmente en 2008 hice el Máster en Interacción Persona-Ordenador en la Universidad de Lleida, pensando en buscar un trabajo específico de UX al finalizar. Mi trabajo por aquel entonces era menos grato y quería especializarme, no le veía futuro a depender de las instituciones públicas canarias, que es lo que ocurre en las Islas. Cuando terminé el máster busqué prácticas fuera de Canarias y terminé en Usolab; primero hice las prácticas y luego me quedé un tiempo allí.

En aquella época aprendí a pensar visualmente, porque hasta ese momento yo seguía teniendo mucho lastre de periodista, pensaba que la mejor solución para explicar algo era escribir un texto. Usolab era un consultora pequeña que sólo hacía diseño y experiencia de usuario, así que allí hice muchos wireframes, algo a lo que no estaba muy acostumbrado, documentos de estrategia, de experiencia de usuario…lo pasé muy bien y aprendí muchísimo, pero al final llegó una oferta de everis y trabajo allí desde el 2011. En everis trabajo como jefe de proyectos, somos un equipo de 16 personas dedicadas a la experiencia de usuario y hay muy buen ambiente, estoy muy contento con la gente que lo forma actualmente.

¿Qué haces actualmente?

Mucho de lo que hago actualmente tiene que ver con la gestión: horas, alcance, presupuesto… La gestión de proyectos más clásica; cuando trabajas en una consultora hay que tener claro que esto cae en el examen. Luego, también trabajo en experiencia de usuario en los proyectos en los que estoy asignado, aunque estoy más al principio, en la parte de definición de objetivos, el alcance, concretar qué queremos sacar de la investigación, participar en la moderación de workshops, entrevistas, etc. y poco a poco, cuando vamos llegando a la fase de proyecto de definición visual, paso a supervisar más que a participar activamente.

Lo que más me interesa es trazar puentes entre la investigación y el interfaz visual, la solución propuesta. Mi objetivo es que se note que hay investigación detrás de las soluciones que ofrecemos, presentar trabajos con los argumentos bien trabajados partiendo de unos buenos insights de investigación. Esa interfase, el paso de una fase a otra, es mi parte favorita.

¿Tuviste algún mentor o maestro que marcó tu camino especialmente?

Cuando empecé a trabajar una persona que me influyó mucho fue José Ramón Quevedo, tenía mucho interés en el ámbito de la experiencia de usuario antes que yo lo conociera. De hecho, él fue quien empezó a montar la comunidad Cadius en Las Palmas de Gran Canaria. Con él aprendí mucho, realmente descubrimos muchas cosas juntos. También de Domingo Cabrera, que ahora trabaja conmigo en Everis. Las personas de las que más he aprendido siempre han sido mis compañeros, te podría dar muchos nombres.

Cuando estuve en Usolab aprendí mucho con Dani Armengol, José Vittone y Armando Fidalgo. Ellos ya llevaban un tiempo en esto, tenían un enfoque muy interesante y eran muy perfeccionistas en las decisiones sobre las interfaces. Siempre he dicho que José Vittone es el mejor diseñador visual con el que he trabajado.

¿Cuál ha sido la decisión más arriesgada de tu carrera?

Soy bastante vago, así que procuro no tomar muchas decisiones y menos aún que sean arriesgadas (risas). Al final del segundo año del Máster en Interacción Persona-Ordenador tocaba hacer las prácticas en empresa. Lo podía haber hecho en Las Palmas de Gran Canaria y quedarme en casa, que era donde tenía trabajo, pero lo dejé todo para “aprender de verdad” y entonces me fui a Usolab. Me fue muy bien y aprendí muchísimo, me vino genial. Estuve un año exacto en Barcelona, creo que esa ha sido mi decisión más arriesgada; como ves, no es gran cosa (risas).

Ruymán Ferrera trabajando frente a una pizarra

Ruyman Ferrera en las oficinas de Everis

“Lo que más me interesa es trazar puentes entre la investigación y el interfaz visual, la solución propuesta. Mi objetivo es que se note que hay investigación detrás de las soluciones que ofrecemos, presentar trabajos con los argumentos bien trabajados partiendo de unos buenos insights de investigación. Esa interfase, el paso de una fase a otra, es mi parte favorita.”

¿Estás satisfecho con tu carrera?

No sé, estoy contento de haber pasado por las empresas por las que he pasado, estoy contento con el momento actual, creo que he tenido suerte. Ahora miro mucho al pasado, la forma en la que trabajamos y lo que hacíamos en Gran Canaria. Si en aquel tiempo me hubieran regalado el libro “Design is a Job”, de Mike Monteiro, me hubiera ido mucho mejor. Es una lectura que se la recomiendo a toda la gente que llega nueva a Everis y aún no lo han leído.

¿Qué piensas que estarás haciendo en 5 años?

Esta es una pregunta un poco tramposa, cuando hago entrevistas a veces aviso: “No te voy a hacer preguntas difíciles como dónde te ves dentro de 5 años”. En algún punto de mi carrera me gustaría trabajar en producto. Es algo que aún no he hecho y creo que es el lugar correcto para comprobar la efectividad de tus decisiones de diseño e iterarlas para mejorar un producto. Esto no lo podemos hacer en consultoría y menos al ritmo y la velocidad a la que vamos nosotros. En cinco años me gustaría trabajar en producto, no pienso en nada más allá.

Describe un día normal en tu trabajo.

Es difícil de hablar de un día normal, pero todos los lunes tenemos reuniones de coordinación, en la que nos contamos el estado de todos los proyectos y del equipo en general. Luego vemos cómo dividir el trabajo de la semana, hablamos de cómo resolver los problemas más concretos de gestión.

Casi siempre tengo algún proyecto en el que estamos trabajando y ahí tengo mucha carga de trabajo en la definición de workshops, técnicas de investigación a utilizar, etcétera. Otra parte de la que no me puedo escapar son las estimaciones para oportunidades de nuevos proyectos: horas, recursos, perfiles… vamos muchos números, hojas de Excel y herramientas internas de gestión.

Luego, otras semanas tengo muchas visitas a los clientes o presentaciones de ofertas. Una parte fundamental entre mis tareas es explicar nuestro trabajo a los clientes, me parece fundamental aprender a argumentar tu trabajo y a defenderlo. Estoy seguro de que tengo más trabajo previo y posterior que de trabajo efectivo sobre las interfaces, y es tan importante una cosa como la otra. Si no sabes defender tus diseños, no serás capaz de que esos diseños sucedan.

Ruymán Ferrera Cadius 2006

Ruymán Ferrera en un Cadius en 2006
Ruymán Ferrera Cadius 2006

Ruymán Ferrera con amigos en un Cadius
Ruymán Ferrera fiesta de despedida de Usolab

Ruymán Ferrera en sus tiempos de Usolab
Ruymán Ferrera en Icities en 2008

Ruymán Ferrera en Icities en 2008

[Sobre las comunidades] “Me parece fundamental, aprendes muchas cosas viendo cómo otras personas se enfrentan a determinados problemas, es posible que sea lo más importante que alguien, que está empezando, tenga que hacer.”

¿Perteneces o has pertenecido a alguna comunidad de diseño?

Sí, desde el 2004 o el 2005, ya no me acuerdo, estuve siguiendo mucho lo que ocurría en la comunidad y la lista de Cadius; mi compañero José Ramón Quevedo empezó a hacer las reuniones en Las Palmas, al principio se unió bastante gente y podíamos hablar de nuestros trabajos y de lo que estaba pasando en el mundo del UX patrio, luego nos fuimos quedando únicamente unos pocos habituales. Posteriormente en Madrid he conocido a mucha gente que seguía en aquella época y he ido conocimiento a más personas en diferentes comunidades o escuelas de diseño, como La Nave Nodriza. En realidad, creo que podría decir que pertenezco a la comunidad de diseño / usabilidad / experiencia de usuario de Madrid.

¿Piensas que este tipo de comunidades son importantes en nuestra profesión?

Me parece fundamental, aprendes muchas cosas viendo cómo otras personas se enfrentan a determinados problemas, es posible que sea lo más importante que alguien que está empezando tenga que hacer. No podría recomendar más a la gente que vayan a escuchar a César Astudillo explicar cómo enfoca el proceso de creación, dándole peso a cómo piensa el diseñador para lanzarles el reto de prototipar algo rápido que luego se pueda testar y basar así la investigación sobre las dudas que van surgiendo. Esa fue su charla en el UX Spain de Valladolid. A mí me parece una clase magistral de cómo se puede razonar, aplicar conocimientos a una práctica cotidiana en la que a veces nos limitamos a utilizar técnicas de manera más rutinaria. Cualquier oportunidad de escucharlo a él o a otras muchas otras personas no se lo puede perder nadie y todo eso lo puedes encontrar en un UX Spain, por ejemplo.

“Me parece muy típico de las personas que están empezando quejarse de los maquetadores o los programadores. La gente no entiende que todo es el mismo trabajo. Cuando un usuario interactúa con tu producto, lo hace con el producto final, no con tu Photoshop.”

Si dieras un solo consejo a alguien que está empezando, ¿cuál sería?

Que no se centre en algo concreto, que tenga una visión global. Que conozca lo que viene antes de que comience su trabajo y que sepa todo lo que pasa después. En general, me parece un problema grande que tenemos los “diseñadores a medias”, como lo llamó José Ramón Quevedo en su charla de UX Spain en 2013. Nosotros definimos una parte y hay otra parte a la que no llegamos lo suficiente, toda la fase de desarrollo y lanzamiento. Nosotros creamos las condiciones necesarias para una experiencia, pero solemos perder el control de lo que ocurre tras la maquetación, o estamos integrados con desarrollo, o existen muchos condicionantes que has de saber que existen y que espero que en un futuro lleguemos a controlar.

Me parece muy típico de las personas que están empezando quejarse de los maquetadores o los programadores. La gente no entiende que todo es el mismo trabajo. Cuando un usuario interactúa con tu producto, lo hace con el producto final, no con tu Photoshop. Con esto no quiero decir que no se atienda a la calidad del diseño y del producto, simplemente hay que prestar más atención y tener más empatía por las otras personas que están trabajando contigo en las otras fases del proyecto, que tienen condicionantes diferentes a los tuyos y que también impactan en el producto y la experiencia.

En resumen, le diría a todo el mundo que supiera todo lo que ha pasado antes de que se vendiera el producto y todo lo que pasa cuando terminan su trabajo hasta que el producto llega a un usuario.

¿Dinos los sitios Web que has descubierto y más visitas últimamente?

No es que sean mis favoritas, pero son las que más frescas tengo ahora mismo en la memoria. Blitzr es un buscador de música que ordena la música desde diferentes fuentes; lo empecé a utilizar como alternativa a GrooveShark. Una cosa que echo mucho de menos es Pandora, que cuando te recomienda una canción puedes ver el motivo por el cual te la recomienda. Alucinas con las explicaciones, puede ser porque te gusten las voces graves, los bajos sean más afines a tus gustos, etcétera… Tienen detrás el proyecto del genoma musical, que es una clasificación a mano, no lo han hecho las máquinas, alucinante.

También probé recientemente Ello.co, es tan simple que creo que tiene un problema con el que nos encontramos mucho, la falta de jerarquía. Al crearme la cuenta estuve pensando cuánto estamos mediatizados por las redes que ya conocemos. Lo que me ocurre en Ello es que no sé si estoy discutiendo sobre un tema o comentando sobre la persona que escribió el comentario inicial. Me gustaría saber si es una decisión consciente o un problema de jerarquía.

“Nosotros definimos una parte y hay otra parte a la que no llegamos lo suficiente, toda la fase de desarrollo y lanzamiento. Nosotros creamos las condiciones necesarias para una experiencia, pero solemos perder el control de lo que ocurre tras la maquetación, o estamos integrados con desarrollo, o existen muchos condicionantes que has de saber que existen y que espero que en un futuro lleguemos a controlar.”

Ruymán Ferrera

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